martes, 4 de enero de 2011

No dejes de cantar

-No dejes de cantar... – le dijo. – Hay quien necesita esperanza.

Y aunque lo perdió todo, aunque en su alma sólo hay dolor, desde aquel día el cantante no ha dejado de cantar.

Canta al amanecer.

Canta a mediodía.

Canta al anochecer...

Canta cuando está alegre (rara vez) pero, sobre todo, canta cuando no quiere cantar; cuando la voz no quiere salir, cuando se le parte el alma... Canta cuando tiene ganas de llorar.

Canta para cumplir con su deber.